Unidad Radical
La construcción radical en una ciudad que le es esquiva desde hace 35 años

El radicalismo logró luego de 60 años hacerse del Gobierno de la Provincia de Santa Fe de la mano de Maximiliano Pullaro y una alianza con Socialistas, Macristas y otras expresiones políticas. Ensalzados, los boina blanca construyen política en Rosario, ciudad que no gobiernan desde 1989.
Hace unos días unos 500 radicales se reunieron en una cena donde asistieron los principales cuadros partidarios de Rosario y la región, además de la fuerte presencia del Gobernador de Santa Fe Maximiliano Pullaro y el Presidente del UCR Provincial Felipe Michlig.
Por supuesto que en el convite estuvieron los dirigentes locales y departamentales. En el mes de junio pasado y tras días de rosca intensa, se concretó la renovación de autoridades en el Comité Departamental de la Unión Cívica Radical en Rosario y Evolución, el sector que lidera el gobernador, se quedó con la presidencia.
Más allá de las rispideces que dejó aquella elecciones de autoridades, en este encuentro de camaradería estuvieron todos: Juan Ignacio Rímini, concejal de Funes, quien fue elegido presidente del comité departamental. Marcelo Lo Giudice (Movimiento de Afirmación Radical) que responde al exdiputado Julián Galdeano y Amaru Martin (Casa Oñativia) una de las líneas internas de Evolución, quienes ocupan las vicepresidencias.
Cabe destacar que el control del Comité Departamental venía siendo ostentado por Radicales Libres, la agrupación que responde a la presidenta del Concejo María Eugenia Schmuck y al rector de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci. Aliados al alcalde Pablo Javkin, la persona que los representaba en el Comité era Alejandro “Súper” Villalba, quienes a pesar de no contar más con la conducción partidaria se hicieron presentes en la cena boina blanca.
Quienes también participaron del encuentro fueron las hermanas Losada, Carolina (Senadora Nacional) y Georgina (Secretaria de Comercio Exterior del Gobierno de Santa Fe); quienes entre otros estuvieron acompañadas por Federico Mur, representante del sector en la mesa de conducción provincial como vicepresidente.
Quizás una de las presencias destacadas de la noche fue la del intendente de Rosario Pablo Javkin, quien hace rato dejó de tributar en la Unión Cívica Radical, pero fue invitado especialmente por el Gobernador Pullaro.
Justamente Pullaro, llenó de elogios al primer mandatario rosarino y además lo invitó a volver a las filas del radicalismo. Un preludio de la sintonía fina que se puede dar a la hora de la conformación de listas para el año próximo.
El encuentro contó con la presencia de los dos principales apuntados por el pullarismo para las elecciones intermedias de 2025, el ministro de Educación provincial José Goity y el hermano del gobernador, Damián Pullaro. No se puede soslayar que también hubo otros dirigentes con ambición de encabezar listas, por ejemplo Georgina Losada o el propio Franco Bartolacci.
Indudablemente que la importancia de este encuentro fue la foto de unidad de la UCR en Rosario. La cena juntó por primera vez en muchos tiempos a todas las expresiones internas radicales, algo que para quienes convocaron no solo marca un éxito, sino una bisagra para lo que viene.
Una ciudad que le es esquiva
Horacio Daniel Usandizaga, apodado “El Vasco”, fue electo en representación de la Unión Cívica Radical en dos oportunidades con más del 50% de los votos como Intendente Municipal de la ciudad de Rosario (1983-1987 y 1987-1989), fue el último dirigente radical en conducir el poder rosarino.
En 1989 mientras se desarrollaba la campaña electoral para presidente declaró en repetidas oportunidades que “Si Menem gana las elecciones a presidente, renunció a la intendencia”, promesa que cumplió en diciembre de ese año. El radicalismo no volvió a acceder a la intendencia de Rosario desde entonces.
La importancia de Rosario en el universo pullarista
La construcción en la ciudad donde vive el Gobernador desde hace muchos años, desde que dejó su Hugues natal, para estudiar., tiene que ver con la mirada a corto y mediano plazo que tienen desde este sector, teniendo en cuenta en las elecciones del año pasado, fue el principal bastión que apuntaló la victoria de Pullaro -sacó 62 puntos, más que la media provincial-, pero para las candidaturas locales tuvo que estrechar alianzas con dos figuras ajenas a la estructura radical, producto de la falta de un candidato competitivo entre sus filas.
De esa manera, Pullaro apostó por el periodista Miguel Tessandori para enfrentar en las PASO a Pablo Javkin en la disputa por la candidatura a intendente de Rosario. En la pelea por el Concejo hizo algo similar y apoyó a Federico Lifschitz, hijo del exgobernador y, lógicamente, con raíces en el Partido Socialista. La apuesta le salió bien y, más allá de que ninguno logró imponerse en su interna, hoy Tessandori es secretario general del Municipio y Lifschitz obtuvo una banca en el Palacio Vasallo, desde donde vende pullarismo duro apuntalado por el gobernador.